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Me encontraba pagando en la caja del supermercado, cuando escuché una voz que me resultó conocida y tal como lo recordaba, era una amiga con la cual estudié y que llevaba más de diez años sin verla, y luego del típico saludo, me preguntó ¿sigues con tu blog? fue en ese momento que pensé por dentro, verdaderamente sigo con el blog? Y fue cuando tristemente respondí, sigue vivo, pero en un estado de comatoso. Todos estos días han pasado muchas cosas y el típico bloqueo en donde no tienes ni por donde empezar a escribir, bloqueo que me ha llevado meses, muchos meses.
Todos estos meses y las inconsistencias que he tenido, y el ver que la mayoría de blogs que seguía también iban desapareciendo, me hice a la idea de que era momento de que concluyera este proyecto. Pero siempre había algo que me negaba a cerrarlo, y busqué forma de reinventarme, cambio de imagen, la cual estuvo en proceso tres veces, y por distintas razones nunca llegaron a finalizar, y ese seguía siendo mi pretexto, que cuando tuviera una nueva imagen, empezaría nuevamente a escribir, peor excusa no pude tener, porque fue una responsabilidad que delegué como una justificación, misma que yo sólo me estaba creando. Pero fue justo hoy, que pensando en las palabras que me dijo mi amiga “¿Sigues con tu blog?” cuando decidí volver a los inicios, tal cual como lo empecé hacer en el 2008, donde solo me sentaba a escribir sobre lo que me apasiona que es la tecnología.
Desde el año 2008 que empecé con The Data Geek en blogspot y que luego migró a su dominio propio GeekGT, duramente estos 14 años he visto a muchos blogs y medios de comunicación desaparecer y este titular de los blogs han muerto, lo he leído en más de 3 ocasiones y en diferentes años, es una constante, pero también pueden haber variaciones y sitios que se nieguen a morir, y unos muertos, que vuelven a renacer.
Este nuevo comienzo, será como volver a los orígenes, tal y como lo estoy haciendo hoy, lo que se inició en un laptop HP Pavillion DV2000 y ahora desde un iPad Air que pesa un 90% menos y tiene más autonomía y potencia, sólo desde ahí podemos ver que la tecnología nos alcanzó y ni cuenta nos dimos, y ahora solo esperar a donde nos seguirá llevando.
